Hoy en día la humanidad está en declive. Y al igual que en los días de Noé, la maldad no va a triunfar, Dios traerá juicio a aquellos que no se conviertan al Señor.
Ante una situación como la que estamos enfrentando, es muy fácil perder la fe. Pero es justo en esos momentos donde debemos volver a Dios y recordar quién es él.