27 de Marzo del 2016 | Luis Molina
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Muchas veces surge esta pregunta. ¿No es suficiente ir un día a la semana? En nuestro pasaje encontramos a Josué que ha visto las grandes maravillas de Dios. Josué es un anciano y está a punto de partir. Él está preocupado por lo que va a transmitir y lo que va a suceder con el pueblo.
En estos versículos Josué va a recordar todo lo que ha pasado en su vida y comienza a dar unas instrucciones.
I. Debemos servir a Jehová por gratitud.
Si alguien había hecho misericordia con el pueblo de Israel es Jehová. Y eso es lo que debemos comunicar a nuestros hijos. ¿Por qué servimos a Jehová? Por gratitud. En los siguientes versículos Josué deja en claro que Dios ha obrado. No es nuestro dinero ni nuestra inteligencia, si algo ha pasado en nuestras vidas es porque Dios lo ha hecho.
Dios ha hecho muchas cosas también en nuestras vidas. Lo que tenemos es por la misericordia de Dios. Josué ha tomado la decisión de servir al Señor por gratitud (Jos 24:15; Gal 2:20; Ef 2:1-6).
II. Debemos servir al Señor porque es necesario
Josué 24:15a La sociedad se está desmoronando. Hay mucho pecado, muchos problemas, ya no hay sana doctrina. A medida que van pasando los años el concepto de la familia y matrimonio va cambiando. Nosotros debemos defender las convicciones. Es a lo que se refería el salmista en Salmo 12. La vileza se puede ver por todos lados y se exaltan cosas que antes se consideraba como vileza.
Mat 5:13, 14-16 El hijo de Dios es la sal y debemos servir a Jehová porque la sociedad en la que vivimos se está desmoronando.
III. Para gozar de sus bendiciones.
Josué comienza con el «yo». En el lugar en el que estamos podemos servir a Jehová.
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