Noé y su familia fueron librados de aquel juicio porque se refugiaron en la justicia de Dios. El anti tipo del arca es la persona de Jesucristo; Solo en Él hay salvación.
La Escritura enseña que Noé practicó la justicia y la comunión íntima con Dios, aunque vivió en una generación de personas corruptas y desobedientes a la revelación de Dios.
Al llegar a la hora de su muerte, el que necesitaba ser consolado era Jesús. Sin embargo es él quien está consolando el corazon atribulado de sus discípulos.